Food Service

Cuatro motivos por los que emprender con un food truck es un buen negocio

Autor: Comerciante, publicado el

Su movilidad y la menor inversión que requieren en comparación con otros negocios del rubro son dos de ellos.

Si hay algo que está intrísicamente vinculado con la comida rápida, eso es el food truck, una alternativa de negocio que aprovecha su movilidad para buscar las mejores oportunidades. Pero cuando hablamos de estos emprendimientos, el tema es mucho más que la posibilidad de cambiarse de sector, porque existen al menos otras tres ventajas que presentan estos carros de comida frente a otros negocios del rubro.

Así al menos lo plantea la secretaria académica de la Escuela de Ingeniería Comercial de la Universidad de Las Américas, Patricia Esparza, quien menciona cuatro motivos por los que un food truck es un buen negocio para quien desee emprender en Chile:

  1. No requieren de grandes inversiones al compararlos con otro tipo de locales de venta de comida, tanto al inicio como durante la operación.
  2. Los food trucks son llamativos y del gusto de los consumidores, ya que les proporcionan una experiencia de consumo distinta que es muy valorada.
  3. Por el lado de la higienización, es más controlable mantener el espacio del food truck que un local de comida
  4. Permite ir cambiando de ubicación a otros sectores más atractivos si es que la ubicación no funciona.

Es que, como reitera la académica de la UDLA, “la idea de un food truck es que pueda ir probando distintas opciones de ubicaciones, porque quedarse en un mismo lugar impide probar opciones de clientes que pueden ser mejores que aquellos de un lugar fijo. No obstante, hay que considerar que en el mercado de comida de consumo rápido los clientes siempre están abiertos a probar opciones y, por ende, la fidelización es relativa”.

Permisos

En cuanto a los permisos de funcionamiento para un food truck Patricia Esparza puntualiza que “los requisitos son los mismos de cualquier negocio en términos legales. Lo que se agregan son requisitos sanitarios y de higiene que tienen exigencias tales como: tener un sistema de agua potable que al menos tenga una capacidad de 100 litros, el cual siempre debe estar abastecido para proveer los lavamanos y el lavado de utensilios”.

“El camión debe ser de una robusta estructura física que asegure que la instalación sea sólida, y además debe ser lavable. El tamaño también importa, ya que debe tener las dimensiones suficientes para la operación y la prevención de riesgos de accidentes al interior. Las condiciones para los permisos pueden variar dependiendo del tipo de productos que se ofrezca, pero siempre pensando en la prevención de problemas sanitarios y de contaminación cruzada en la manipulación de los alimentos”, concluye la docente.