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Chocolates: Un regalo para el Día de la Madre que nunca pasará de moda

Autor: Comerciante, publicado el

“Seamos honestos, nadie consume chocolates para estar saludables, se consume por placer”, afirma el nutricionista Paolo Castro.

El chocolate se debe consumir por gusto, “como una delicadeza del paladar que proporciona una sensación de placer, activando una estimulación neurosensorial que hace que tantos consumidores en el mundo quieran seguir probándolo”, responde Paolo Castro, director de la carrera de Nutrición y Dietética de la Universidad Central, cuando Comerciante le pregunta por este producto derivado del cacao.

Lo primero es mencionar que el cacao, como fruto, proporciona la semilla, la manteca y la pulpa. Esto quiere decir que lo que conocemos como cacao en polvo es el resultado final del procesamiento de la semilla del cacao. La semilla de cacao contiene sustancias que se comportan como antioxidantes y estimulantes, similares al efecto del café, aunque en menor concentración. Sin embargo, cabe destacar que también se trata de un producto de alta densidad calórica. Por lo tanto, las personas que quieran cuidar su composición corporal deben tenerlo en cuenta.

Probablemente la tendencia se concentra en ofrecer chocolates como un acto social aceptado y relativo al cariño. Aunque lo más frecuente es encontrarse con regalos de muy buenas intenciones que se acercan más a los sucedáneos de chocolate, que al verdadero chocolate. Sobre todo en estos tiempos en que la inflación castiga aún más el bolsillo de las personas. Y el acceso a productos de mayor precio, como es el caso de los verdaderos chocolates, se limita y se opta por un bien sustituto. Lo que no resta el gesto de cariño evidentemente.

Los productos altos en azucares añadidos tienen mayor venta en las estanterías y, por lo tanto, se aprecia que son más consumidos aquellos de bajo contenido de azúcar y alto contenido de cacao. La razón puede ser relativo a su sabor más amargo o su mayor costo. Respecto del formato, es variable, aunque regularmente barras y bombones son los más apetecidos.

Difícil poder hablar de un chocolate sano. Es una definición compleja en un producto de estas características. Por lo tanto, es más sencillo presentar a este producto como de mejores características organolépticas, cuando tiene un alto contenido de manteca de cacao, cacao y menor contenido de azucares añadidos. Esto proporcionaría una estimulación de los sentidos para aquellos paladares exigentes. Finalmente, seamos honestos, nadie consume chocolates para estar saludables, se consume por placer.