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Top 5 de opciones para aromatizar el automóvil en verano

Autor: Comerciante, publicado el

Un ambientador resulta casi imprescindible para darse la tarea de conducir con comodidad el vehículo.

Aunque en la práctica resulta bastante sencillo elaborar un aromatizador para el interior del vehículo con las esencias favoritas de cada uno, la verdad es que en el mercado chileno existe una amplia variedad de este tipo de productos.

Es que entre el aroma que deja la colilla de un cigarrillo en el cenicero, el olor a sandwich u otro alimento comido a la rápida al interior del auto, o el del perro que se quedó impregnado cuando se lo llevó al veterinario, por ejemplo, son muchas las ocasiones en que un ambientador resulta casi imprescindible para darse a la tarea de conducir con comodidad el vehículo.

Elegir cuál es el mejor ambientador para cada cual es cosa de gustos, pero para hacerlo la idea es tener algunas alternativas entre las que elegir. A continuación les presentamos cinco opciones.

Aromatizadores

Aromatizante pino: Es un clásico que todavía tiene muchos seguidores y que recrea el olor de los pinos canadienses, aunque fue inventado en Estados Unidos. Generalmente cuelga del espejo del auto.

Aromatizador Febreze: Se puede ubicar en diversas partes del vehículo de manera fácil y práctica. Es particularmente útil para eliminar el olor a cigarro o a comidas.

Aromatizante líquido para auto: Se trata de un desodorante ambiental con un repuesto líquido muy fácil de colocar. Además, por su tamaño, permite acomodarlo en cualquier parte del auto.

Aromatizador con olor a auto nuevo: Se trata del ambientador para el vehículo más vendido en Amazon durante la pandemia. Es que su aroma evoca los materiales nuevos, recién salidos de fábrica, y genera un vínculo emotivo con el recuerdo de la primera vez que el dueño se subió al auto.

Aromatizante personal: La opción de elaborar uno mismo el aromatizador para el auto es bastante sencilla. Sólo se necesita alcohol 96º, la esencia favorita y un recipiente que puede ser un frasco pequeño para colgar o uno de los denominados sacos de olor. La mezcla se hace con un 70% de alcohol y 30% de esencia.