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La importancia de una dieta alta en lácteos y los mitos que hay que derribar
Autor: Comerciante, publicado el
La leche constituye el mejor aporte de calcio, proteínas y otros nutrientes necesarios para la formación de huesos y dientes.
La ingeniera en alimentos Claudia Narbona apunta de entrada que “los beneficios de la leche y productos lácteos no se limitan exclusivamente a su valor nutricional, sino que se extienden más allá”.
De hecho, asegura que dichos beneficios “constituyen un factor de prevención en determinadas patologías afluentes, como son la enfermedad cardiovascular, algunos tipos de cáncer, la hipertensión arterial o en patología ósea o dental”.
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“Puede contribuir también en la lucha frente al sobrepeso y la obesidad infantil”, apunta con especial énfasis.
La académica de la carrera de Nurtrición de la Universidad Central explica que “la leche contiene proteínas de alto valor biológico, hidratos de carbono (lactosa), lípidos, yodo, calcio, fósforo, vitaminas A, B12 y riboflavina”.
“La leche constituye el mejor aporte de calcio, proteínas y otros nutrientes necesarios para la formación de huesos y dientes”, agrega.
Pero eso no es todo, porque la leche “contiene un hidrato de carbono, lactosa, el cual al ser degradado en el organismo genera glucosa y galactosa, siendo esta última muy importante en la síntesis de glucolípidos cerebrósidos, esenciales en el desarrollo neurológico temprano de los niños”.
Características de los tipos de leche
A continuación, la experta detalla las características que distinguen a las principales variedades de leche que se presentan en el mercado.
1.- Entera: Contiene 146 cal, 7,9 g de lípidos ( 4,6 g de grasa saturada, 183 mg de Omega 3), 97,6 IU de vitamina D.
2.- Semidescremada: Contiene 102 cal, 2,4 g lípidos (1,5 g saturada, 9,8 g de Omega 3), 127 UI de vitamina D.
3.- Descremada: Contiene 83 cal, 0,2 g lípidos (0,1 g grasa saturada, 2,5 mg de Omega 3), 100 UI de vitamina D.
“Entre estas tres, las proteínas, los hidratos de carbono y el Calcio se mantienen similares en cantidad”, apunta.
4.- Con proteínas extras: La leche con un plus de proteínas y de calcio se obtiene añadiendo un concentrado de estos nutrientes a la leche o productos lácteos.
“También existen otros procesos, como por ejemplo someter la leche a ultrafiltración, que separa parte del agua y da como resultado un líquido más concentrado en nutrientes (proteína y Calcio)”, agrega.
Además, señala que “cuando se indica en el envase, un 50 % más de proteína, significa que se han incorporado 1,5 g más de proteína a la leche, subiendo de 3,0 g a 4,5 g de proteína”.
Mitos a derribar
Al hablar de los mitos que rodean el consumo de lácteos, de inmediato Claudia Narbona declara como categóricamente falso aquel que dice que los seres humanos somos los únicos mamíferos que prolongamos innecesariamente el consumo de leche.
“Los seres humanos, al igual que todos los seres vivos, tenemos necesidades de nutrientes para la vida diaria, pero a diferencia de otros mamíferos, nuestro organismo no es capaz de sintetizar la gran mayoría de ellos; por ello, necesitamos obtener estos nutrientes de fuentes externas”, platea la docente.
Y añade que, “en ese sentido, hay que considerar que el ser humano puede conseguir leche de otros mamíferos, lo cual explica que seamos los únicos que sigamos tomándola: somos los únicos que podemos hacerlo”.
También descarta de plano que los lácteos engorden.
“Debido a los problemas de obesidad en el mundo, se han realizado diversos estudios científicos e investigaciones que demuestran que las personas que consumen yogurt y leche presentan un menor riesgo de sobrepeso y obesidad”, asegura sobre el tema.
“Además, es importante resaltar que la leche contiene sustancias bioactivas que evitan los depósitos de grasa. Como ocurre con cualquier líquido, un vaso de leche antes de las comidas acelera la sensación de saciedad”, cierra el tema.