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Mitos y verdades a la hora de tener un gato: alimentación adecuada y cuidados

Autor: Comerciante, publicado el

Es importarte considerar siempre que para que un alimento sea realmente bueno, el gato debe querer comerlo.

“Un buen alimento para gatos debe cubrir los requerimientos nutricionales del animal, según su edad, nivel de actividad y condición de salud”, aclara de entrada Paola Mujica, académica de la Escuela de Medicina Veterinaria de la Universidad de las Américas, Casa Central.

Y apunta que, en general, “todos los alimentos secos (pellets) formulados para gatos cumplen con los requerimientos mínimos de mantención para la etapa de vida para la que están formulados”.

“Es importarte considerar siempre que para que en la práctica sea un buen alimento, el gato debe querer comerlo, por lo que las diferencias en texturas, tamaños y sabor deben considerarse también para seleccionar un alimento”, añade.

Respecto de si es mejor alimentarlos con un buen pellet o prepararles una rica y equilibrada comida casera, la docente sostiene que “ambas alternativas pueden ser adecuadas, siempre y cuando exista una correcta manipulación de los alimentos y la dieta casera sea cuidadosamente formulada por un profesional especialista, para asegurar que cumpla el requerimiento nutricional del animal”.

Cómo elegir el alimento

Agrega que “el tipo de alimento que es mejor para cada gato debe seleccionarse considerando factores como la edad, nivel de actividad, condición de salud y que el animal debe aceptar el alimento que le ofrezcamos, ya que los gatos no deben dejar de ingerir nutrientes porque el ayuno pone en riesgo su salud”.

Indica que al comprar el alimento para el gato hay que fijarse “en el listado de ingredientes de los alimentos, dando prioridad a aquellos alimentos que tengan entre sus primeros 4 o 5 ingredientes a fuentes de proteína animal y no vegetal, e idealmente que no sean subproductos de otro alimento. Por ejemplo un alimento que tenga como primer ingrediente ‘pollo deshuesado’ debiese ser de mejor calidad que uno cuyo primer ingrediente es ‘harina de pollo’ o ‘maíz'”.

La académica explica además que “en el mercado existen diversas alternativas de alimentos formulados para apoyar el tratamieto de distintas patologías que pueden afectar a los gatos, como alergias, algunas patologías urinarias, insuficiencia renal, entre otras”.
“Lo importante es que estas dietas deben ser recomendadas por un Médico Veterinario, según la necesidad específica de cada animal. En la mayoría de los casos no constituyen un tratamiento integral por sí solas, sino que son un complemento”, precisa.

La salud del gato

Por otra parte, la coordinadora de Vinculación con el Medio, de la Facultad de Medicina Veterinaria y Agronomía de la UDLA, Karen Valenzuela, indica que “al adoptar un gatito, se debe llevar de inmediato al médico veterinario, quien entregará las directrices de su cuidado para toda la vida”.

“Les indicará plan de vacunaciones y desparasitaciones, tipo de alimentación, manejo en relación a su ambiente, como por ejemplo tipo de arenero y el tipo de arena. También en qué lugar ubicar el baño del gato, porque no cualquier lugar es idóneo para la caja de arena, ya que debe ser ‘un lugar privado'”, complementa.

“Otra indicación importantísima es la edad a la cual se debe esterilizar, lo cual evitara nacimientos no deseados y evitara enfermedades infecciosas transmisibles”, sostiene Valenzuela.

Al respecto, el académico de la misma facultad, Claudio Galleguillos, detalla que “no existe consenso en cuál es la edad ideal para esterilizar a un macho o a una hembra. Se recomienda generalmente que hayan terminado su crecimiento, o bien, que sea justo antes del inicio del período de apareamiento. Así, los gatitos en nuestro hemisferio tienden a nacer entre septiembre y enero, y la fecha recomendable para esterilizarlos es entre junio y julio, teniendo en este caso entre 6 y 9 meses de edad”.

En cuanto a los antiparasitarios, Karen Valenzuela plantea que tanto los “internos como los externos son de vital importancia, debido a que protegen de enfermedades al gato como a la familia que lo adopta. Se debe recordar que existe la zoonosis. Es decir, enfermedades que transmiten los animales al hombre. Y con el sencillo y económico manejo de desparasitación externa e interna se pueden evitar enfermedades para el gato y familia”.

Por último, indica que a los gatitos “se les debe lavar los dientes desde los 2 meses de edad, 3 veces por semana, con un cepillo para gatos. En el mercado hay pastas especiales, sin embargo, solo con agua es suficiente. A pesar que cambiara su dentadura se realiza desde los 2 meses para que el se habitué a este manejo y lo tome como un juego o algo normal”, concluye.