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El boom de los lácteos fortificados en proteínas

Autor: Comerciante, publicado el

Ninguno de los etiquetados de advertencias dice ‘alto en proteínas’ como un condicionante negativo de riesgo.

Los lácteos fortificados en proteínas son aquellos que han tenido un aumento de al menos un 10% de adición de proteína.

Para el académico de la carrera de Nutrición y Dietética de la Universidad Central, Paolo Castro, “su popularidad nace como consecuencia de los etiquetados de advertencias que traen los productos, en donde ninguno de ellos dice ‘alto en proteínas’ como un condicionante negativo de riesgo, lo que favorece a la industria alimentaria a inclinarse por esta alternativa comercial”.

El docente aclara que en una alimentación balanceada “que un producto tenga un poco más o un poco menos de proteínas no es determinante”.

“Pero para personas que han sido evaluadas por nutricionistas y requieren un aporte proteico mayor por sus necesidades y ejercicio físico, este tipo de productos pueden ser una alternativa”, explica.

¿Cuánta proteína?

Respecto de cuál es la cantidad de proteína recomendada diariamente y cómo los lácteos fortificados pueden ayudar a alcanzar esas recomendaciones, Paolo Castro indica que “a nivel poblacional se habla de un promedio de unos 50g. Pero el análisis individual puede superar este valor”.

“Lo anterior debe ser calculado por un nutricionista y aportado en relación a sus necesidades nutricionales, etapas de crecimiento, enfermedades, etc”, cierra el académico de la UCEN.